sábado, 29 de noviembre de 2008

Transsiberian

Valoración: Floja

Tras la insoportable y soporífera "El maquinista", Brad Anderson vuelve a la carga con este thriller de carácter menor, en el que trata de emular sin éxito al rey del género en cuestión: Alfred Hitchcock.

"Transsiberian" es una película más o menos entretenida en la que un matrimonio con algunos problemas de pareja (pero, ¿y quién no los tiene?) y cierto pasado turbio, entra en contacto con un par de jóvenes mochileros en un viaje por Siberia, en el famoso tren que da nombre a la película. A partir de ahí se dan ciertas intrigas, en la mayoría de los casos previsibles, copiadas con más o menos torpeza de las películas de Hitchcock.

Y poco más podemos decir de un film en el que la mayoría de sus personajes están desaprovechados por un guión poco elaborado, que sólo se centra en Emily Mortimer. Los roles de Woody Harrelson y Ben Kingsley daban para mucho más, pero como el responsable del guión también es el señor Anderson, no se le puede exigir talento a quien no lo tiene.

Si fuera un telefilm de sobremesa de fin de semana, no estaría mal, pero tratándose de la gran pantalla, suspende, quizá no estrepitosamente, pero se debe exigir más a cualquier producción cinematográfica que se vanagloríe de serlo.

Appaloosa

Valoración: Floja

"Appaloosa" ya es, por méritos propios, el western más sobrevalorado del siglo XXI. En todo tipo de prensa escrita se pueden leer maravillas hacia este film y yo me pregunto, ¿por qué? Quizá sea que Ed Harris es un hombre querido y respetado en el cine o a lo mejor su productora ha pagado mucho dinero para recibir buenas críticas (desafortunadamente hay mucho de esto en la actualidad) pero ciertamente, el film que hoy nos ocupa es lamentable.

El talento de Harris como intérprete es incuestionable, pero sus cualidades como cineasta dejan mucho que desear. "Pollock" no fue como para tirar cohetes, desde luego y esta mediocridad llamada "Appaloosa" sirve para comprobar la resistencia del cuerpo humano en el sentido de ¿podré aguantar todo el metraje sin quedarme dormido?

Lo único rescatable de toda la película es su inicio, en el que las reminiscencias a "Infierno de cobardes" y "Sin perdón" son palpables. Ahora bien, no por intentar utilizar elementos del gran Clint Eastwood uno logra una película de calidad, ya que hay que saber cómo insertarlos en el devenir de la historia, para así crear expectación en el espectador en lugar de sueño.

Así, tenemos un pueblo sometido por un cacique, al que llegan dos pistoleros con un peculiar sentido de la justicia, por lo que uno piensa que va a disfrutar de un buen clásico de vaqueros, actualizado. Hasta que aparece la irregular Renée Zellweger, capaz de hacer lo mejor y lo peor, repitiendo en parte su odioso rol de "Bridget Jones" ambientado en el oeste. A partir de su "estelar" aparición en escena, todo el argumento queda supeditado a su personaje, logrando que un film con actores de la talla de Jeremy Irons, el propio Ed Harris y Viggo Mortensen, con todo a favor para triunfar, fracase estrepitosamente por mucho que todos los críticos que se dejan comprar pretendan todo lo contrario.

Mi consejo es el siguiente: si alguien no ha visto todavía el imponente remake de "El tren de las 3:10", olvidad "Appaloosa" e id rápidamente a ver la película mencionada. Seguro que todos me lo agracecéis.

sábado, 22 de noviembre de 2008

Quantum of Solace

Valoración: Floja

Doug Liman y Paul Greengrass han sentado cátedra con su Jason Bourne, de tal manera que hasta el mismísimo James Bond le sigue los pasos (nótese que las iniciales de ambos personajes son idénticas: J.B.). Tal ha sido la aceptación de la trilogía de Bourne que "Quantum of Solace" presenta innumerables paralelismos con ella: el similar estilo visual moderno, los impactantes y vertiginosos planos, la misma estética en persecuciones, localizaciones en Europa, ritmo frenético, coreografías muy parecidas en las peleas... Lástima que no hayan copiado también el guión, pues a pesar de contar con Paul Haggis (Crash, Million Dollar Baby, Cartas desde Iwo Jima) la historia de la última película del mítico 007 es una de las peores de toda la colección.

La impresión que uno tiene al terminar de ver este film es la de que se ha comenzado con una nueva era de Bond, siendo "Muere otro día" el último episodio de lo que podríamos considerar la saga inicial. La primera película de Daniel Craig sirvió para mostrar los inicios de Bond y esta segunda es claramente una continuación, pues termina, en parte, el argumento iniciado en la anterior.

Este James Bond no es el mismo con el que todos hemos crecido. No sólo ya no fuma, sino que ha perdido ese divertido punto de lograr sacar de quicio a los villanos con todo tipo de cinismos, repelencias y amoríos varios con los ligues de sus malvados rivales. Ahora, simplemente, Bond es un tipo frío y calculador que hace que los malos se mueran de miedo, llegando a convertirse en una especie de cruce entre la crueldad de Jack Bauer, el cinismo de Bruce Willis y la escasa sutileza de Schwarzenegger y eso no es lo que esperamos de un personaje que desarmaba a sus enemigos utilizando el carisma en lugar de la fuerza bruta.

Así pues, el segundo film de Daniel Craig como Bond ha resultado francamente decepcionante, no sólo por lo que podría calificarse de un plagio de Jason Bourne, sino porque tanta acción sin sentido llega a aburrir al espectador, algo hasta ahora impensable en un relato de 007.

Los niños de Huang Shi (The children of Huang Shi)

Valoración: Floja

Roger Spottiswoode (El sexto día) nos ofrece esta desaprovechada cinta sobre un hecho histórico acerca de un gran grupo de huérfanos que superó todo tipo de inclemencias para escapar de un conflicto bélico y crear su propio hogar, de la mano de un corresponsal de guerra. Teniendo en cuenta que este hecho apenas si dura unos pocos minutos de metraje, nos podemos hacer una idea de lo mal enfocada que está la historia por parte de guionistas y realizador.

La ambientación está muy conseguida: localizaciones, decorados, vestuario, fotografía... Pero no sólo de atrezzo vive el cine. El elenco de actores es de calidad, pero el guión trabaja tan poco a sus personajes que éstos sólo pueden limitarse a conferir cierto dramatismo a la acción.

Las posibilidades que ofrecía un niño problemático que era el líder del grupo, así como el hecho de que el ejército quería reclutar a los muchachos, no están bien explotadas, lo mismo que las supuestas penurias de un viaje tan largo. Y qué decir de la pequeña historieta de amor... Pues eso, mejor no decir nada.

Hay películas que se realizan de manera torpe, a pesar de tener buenos mimbres para construir una buena historia. Es el caso de "Los niños de Huang Shi", que sólo atrae en los primeros minutos, es decir, mientras no se narra el grueso central del argumento. Así pues, absolutamente no recomendable.

sábado, 8 de noviembre de 2008

Red de mentiras (Body of Lies)

Valoración: Pasable

Decepcionante film basado en una novela de David Ignatius, columnista del Washington Post, acerca de cómo un agente de la CIA logra dar con un peligroso terrorista, responsable de una serie de atentados internacionales. ¿Por qué decepcionante? Muy sencillo: cuando el reconocido Ridley Scott tiene a su cargo a intérpretes de la talla de Russell Crowe y Leonardo DiCaprio, las expectativas son altas, así que al descubrir que a mitad de metraje la película comienza a perder su interés, el inevitable resultado final son las contínuas miradas al reloj seguidas de exclamaciones del tipo "¡Pues sí que dura esto!".

La primera mitad de la película es de calidad. Narra una buena historia de espías ambientada en la actualidad, con el terrorismo como telón de fondo. No sólo observamos el arduo trabajo requerido para intentar desarticular células islamistas, sino también los juegos de poder llevados a cabo por los distintos Gobiernos involucrados en la investigación, hasta el punto de que nuestro protagonista, bien interpretado por DiCaprio, no sabe en quién confiar.

Hasta ahí la cosa iba bien, pero en el momento en que al bueno de Ridley se le empieza a notar que ha visto demasiadas veces la película de su hermano "Spy Game" (ésta sí que es fantástica) el film empieza a decaer hasta convertirse en soporífero. El guión introduce con calzador una historia de amor bastante inverosímil, para intentar crear el final de un relato que empezaba a complicarse con demasiadas historias secundarias girando en torno al argumento principal, lo que termina traicionando el espíritu realista del que estaba impregnada toda la primera hora. Y es que mientras en la mencionada película de Tony Scott, el jefe del protagonista (Robert Redford) y la chica de la que se enamoraba Brad Pitt (Catherine McCormak) eran personajes de gran calado, aquí poco pueden hacer Russell Crowe y Golshifteh Farahani con sus maltratados personajes, lo que invariablemente hace decaer muchos enteros toda la producción.

Como es habitual en este tipo de superproducciones, la puesta en escena es magnífica dada la perfección exhibida a la hora de retratar el mundo de Oriente Medio pero, por muy bien envuelta que esté, la historia naufraga de forma importante, quedando muy por debajo de otros films similares y dejando en entredicho a un Ridley Scott que ahora mismo está muy lejos de sus míticas "Alien" y "Blade Runner".