domingo, 10 de octubre de 2010

Morir todavía


Valoración: Buena

En 1991 Kenneth Branagh (Mucho ruido y pocas nueces, Los amigos de Peter) dirigió y protagonizó Morir todavía, una película englobada dentro del cine negro, aderezada con cierto aroma de género fantástico.

Se trata de un relato en el que una mujer que padece amnesia, recuerda una vida anterior gracias al tratamiento que sigue para recuperar la memoria. El problema es que en dicha vida hubo una turbulenta historia de amor, celos y asesinato, lo que hace que el estupendo guión de Scott Frank (Minority Report, Prisioneros del cielo) divida la trama en dos partes: todo lo sucedido en los años 40 y la investigación actual sobre quién es la mujer amnésica.

La intriga tiene mucha influencia de Hitchcock, hasta el punto de que las referencias hacia Crimen perfecto son más que evidentes. Por otra parte Branagh, como buen inglés, otorga ciertos matices shakespearianos al conjunto, lo que le confieren cierto aire clásico. Además está el uso del blanco y negro para las secuencias del pasado, entre las que hay que destacar una puesta en escena bastante glamourosa, en la línea de las antiguas estrellas hollywoodienses.

En este sentido la elegida para el papel protagonista no me cuadra. No pongo el duda el talento de Emma Thompson para la interpretación, pero ¿una diva? Lo siento, su físico no da el perfil. Branagh, por su parte, sí hace gracia en un rol un tanto a lo Woody Allen de un detective privado un tanto particular, muy diferente de los grandes investigadores propios del cine negro.

El relato no está exento de sentido del humor, pero sin llegar a la parodia. Hablamos de un inteligente ejercicio a lo Agatha Christie, ya que todo el mundo parece culpable. Sin embargo, en un segundo visionado, podremos fijarnos detenidamente en las diferentes pistas que se nos van ofreciendo durante todo el metraje, encaminadas a la resolución del antiguo crimen antes mencionado.

En resumen, Morir todavía es una película muy entretenida, que combina hábilmente elementos fantásticos y de terror con el suspense y el amor. Además está excelentemente interpretada (a los ya mencionados Branagh y Thompson hay que añadir intérpretes del calado de Derek Jacobi, Robin Williams y Andy García) y muy bien dirigida por Branagh, a pesar de su corta experiencia (era su segundo trabajo como realizador tras Enrique V) demostrando ciertos alardes en contraluces y contrapicados, además de pericia narrativa. Si aún no la habéis visto, os la recomiendo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario